El número de delitos de odio denunciados en escuelas y universidades de Estados Unidos casi se duplicó entre 2018 y 2022, lo que convierte a estas instituciones en el tercer lugar más común donde se reportó este tipo de crimen en el país, según datos publicados por el FBI.
En 2022 se denunciaron alrededor de 1.300 delitos de odio en escuelas primarias, secundarias y universidades frente a 700 reportados en 2018, lo que representa un aumento de alrededor del 90%.
Los crímenes de odio reportados en las instituciones educativas ocurrieron con mayor frecuencia en las escuelas primarias y secundarias, según el informe que analizó datos recopilados por las autoridades locales, estatales y federales en el periodo de cinco años.
Entre 2018 y 2022 se denunciaron más de 4.300 delitos de odio en las escuelas y el tipo de prejuicio más común en ese periodo fue contra los afroamericanos, seguido por el odio a los judíos y a los miembros de la comunidad LGBTQ.
El crimen de odio más denunciado en las escuelas en el periodo analizado fue la intimidación. En segundo lugar lo ocupa las denuncias de vandalismo o daño a la propiedad, que incluye grafitis con símbolos o palabras de odio.
Para 2022 se reportaron en total 13.346 delitos de odio ocurridos en Estados Unidos. Los centros de instrucción educativa ocupan el tercer lugar más común donde se reportó este crimen, por detrás de los hogares o viviendas con 3.655 casos denunciados y las calles y carreteras con 2.151 casos investigados.
Esta es la primera vez que el FBI y el Departamento de Justicia publican un análisis exhaustivo de los casos de delitos de odio en escuelas primarias, secundarias y universidades.
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