El Coronavirus no da tregua a Long Island, Nueva York, donde los casos positivos de infecciones siguen trepando a niveles muy preocupantes, en especial a vísperas de las reuniones navideñas las cuales podrían aumentar más los contagios en nuestra área.
La ejecutiva del condado de Nassau, Laura Curran, informa que en este lugar la tasa de positividad de COVID-19 está en 5,6%, con 1,015 residentes dando positivo de 18,240 personas examinadas.
Mediante comunicado se indica que los hospitales de Nassau registran 550 hospitalizaciones por el coronavirus con 62 pacientes atendiéndose en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y 34 pacientes asistidos con ventiladores para poder respirar.
«Todos podemos tener un poco de alegría navideña, pero sigamos usando el sentido común para evitar cierres mientras esperamos una distribución más amplia de las vacunas», declaró Curran.
«Y recuerde: puede aprovechar las sólidas pruebas de COVID-19 en todo el condado si tiene síntomas o ha estado expuesto», remarcó.
En tanto, para brindar alivio financiero a los restaurantes de Nassau que atraviesan problemas durante la pandemia, el legislador Joshua Lafazan (Woodbury) ha presentado la «Ley de protección de restaurantes» que limitaría las tarifas que los servicios de entrega de alimentos de terceros pueden cobrar a los restaurantes locales.
Infecciones en Suffolk
Por su parte, el estado de Nueva York informa que hay 1,239 nuevos casos positivos de COVID-19 en el condado neoyorquino de Suffolk, tras realizar 17,085 pruebas, para una tasa de positividad del 7.3 %.
“Una vez más, el número actual de casos nuevos de COVID-19 ha alcanzado niveles preocupantes. En el transcurso de la última semana, una tasa de positividad superior al 7 % se ha vuelto común, en lugar de solo un pico de un día», declaró el ejecutivo de Suffolk, Steve Bellone, sobre la respuesta de su gobierno frente al coronavirus.
“La Navidad está a solo dos días de distancia, y si no tomamos las precauciones adecuadas, es seguro decir que lo peor de este virus aún puede estar por delante de nosotros. Todos estamos cansados, pero este virus está aquí y se está extendiendo por nuestras comunidades. Si bien nuestras celebraciones pueden ser un poco más pequeñas este año, todos estaremos más seguros».
Bellone también apuntó que la llegada de la vacuna marca el principio del fin, pero ahora no podemos dejar de tomar las medidas preventivas como usar mascarillas y mantener el distanciamiento social.
«Nuestras acciones esta semana y la próxima tendrán implicaciones importantes en los niveles de casos y hospitalizaciones a medida que nos acercamos al Año Nuevo. Algo tan simple como practicar el distanciamiento social y usar una máscara puede literalmente salvar vidas. Juntos, una vez más aplastaremos la curva, así que, enmascaremos, Long Island», enfatizó.
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