Además de su histórica inversión de 225 millones de dólares en los sistemas de agua, el supervisor del Town de Hempstead, Don Clavin, anunció el reemplazo de una torre de agua de 70 años de antigüedad en Uniondale por un tanque de almacenamiento de agua nuevo y de última generación que servirá a su comunidad durante las próximas décadas.
El tanque de almacenamiento existente, construido originalmente en 1955, mide 175 pies de alto y se retirará después de muchos años de servicio.
Debido a su antigüedad y al gasto estimado de mantenimiento y mejoras necesarias, el Town optó por un enfoque más rentable al construir una torre de agua completamente nueva que proporcionará agua limpia de manera eficiente a los residentes para la próxima generación.
«Mantener nuestra infraestructura de agua potable es una parte crucial de la protección de la salud pública de nuestra ciudad», dijo el supervisor de Hempstead, Don Clavin, durante la conferencia de prensa celebrada el 21 de enero en la Planta de tratamiento de agua del Town localizada en Garden City.
«A medida que esta torre de agua envejece, se requiere más trabajo y dinero para asegurarse de que pueda seguir prestando servicios a su comunidad, y es hora de un cambio. Este proyecto representa nuestro compromiso con la mejora continua de nuestros sistemas de agua, y esperamos los beneficios que traerá a los residentes actuales y futuros de Hempstead Town», expresó el republicano Clavin.
La nueva torre de agua en Uniondale se construirá con una base de pedestal de hormigón y un tanque de acero compuesto en la parte superior. Sus soportes de acero no estarán expuestos a los elementos como en los tanques antiguos, lo que hace que sean más fáciles y económicos de mantener.
La Town de Hempstead tiene previsto presentar una licitación para la construcción este verano y espera que el proceso de construcción demore unos 18 meses. Se espera que el tanque esté en pleno funcionamiento para el verano de 2027.
Este proyecto está lejos de ser la única mejora de la infraestructura hídrica emprendida por el Town de Hempstead. En los últimos cinco años, la ciudad ha comprometido $225 millones en proyectos de tratamiento de agua, incluida la incorporación de múltiples sistemas de tratamiento de Proceso de Oxidación Avanzada (AOP) y Carbón Activado Granular (GAC) para tratar contaminantes emergentes como PFAS en 20 de sus pozos.
Se han obtenido más de $85 millones en fondos federales y estatales para estos proyectos, y los funcionarios de Hempstead siguen abogando por más. La ciudad, junto con más de dos docenas de proveedores de agua en Long Island, también está llevando a cabo litigios contra los contaminadores para recuperar los costos de los fabricantes responsables de poner estos contaminantes en el suelo.
«Estamos orgullosos de los esfuerzos de nuestra ciudad por ser proactivos en el mantenimiento de nuestra capacidad de proporcionar a los residentes un servicio de agua eficiente y eficaz», remarcó Clavin.
«Todos estos proyectos se centran en garantizar que nuestra agua potable siga siendo de la más alta calidad y al menor costo posible para los contribuyentes. La ciudad está dedicada a mantenerse a la vanguardia de la tecnología de tratamiento de agua para el mejoramiento de los 800.000 habitantes de Long Island a los que servimos», concluyó.
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