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De España a Queens: el viaje de solidaridad y éxito de un carpintero sindicalizado

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Como orgulloso miembro de Local 45 y miembro de la junta directiva del Club Latino del sindicato, mi camino para convertirme en carpintero sindicalizado ha sido un testimonio del poder de la solidaridad y de la búsqueda de una carrera digna y estable. Originario de España, emigré a los Estados Unidos y encontré mi hogar en Queens, donde descubrí tanto la noción de comunidad, como las oportunidades.

Antes de convertirme en carpintero sindicalizado, tuve varios trabajos, pero mi corazón siempre se sintió atraído por la construcción. Mi camino hacia la afiliación sindical comenzó cuando me reuní con representantes del Consejo de Carpinteros del Distrito de la Ciudad de Nueva York en un lugar de trabajo no sindicalizado. Me explicaron los beneficios de estar en el sindicato y me presentaron un programa provisional, una puerta de entrada al sindicato. Gracias al apoyo de los líderes sindicales que rápidamente se convirtieron en mentores invaluables, conseguí mi lugar en el Sindicato de Carpinteros de la Ciudad de Nueva York. Esta oportunidad ha transformado mi vida, brindándome estabilidad y un sentido de pertenencia.

Al trabajar en sitios de trabajo no sindicalizados, fui testigo de primera mano de los marcados contrastes entre el trabajo sindicalizado y el no sindicalizado. Las empresas no sindicalizadas a menudo priorizan la producción sobre la seguridad, emplean trabajadores no calificados y utilizan materiales de calidad inferior, comprometiendo la calidad y la seguridad de los proyectos. Algunos creen en el mito de que ganan más en un trabajo no sindicalizado, pero esto no puede estar más lejos de la realidad. Los trabajadores no sindicalizados se pierden los beneficios a largo plazo de tener salarios competitivos y garantizados, buena atención médica, tiempo libre remunerado, seguridad de jubilación y mucho más.

Además, el sindicato da prioridad a la capacitación en seguridad y habilidades, garantizando que todos los miembros regresen sanos y salvos a casa al final del día. El énfasis del sindicato en la educación continua nos permite sobresalir en nuestro oficio, asegurando que siempre estaremos a la vanguardia de nuestra industria. El sindicato también defiende activamente nuestros derechos, busca más oportunidades laborales para los miembros y ofrece programas de apoyo esenciales para los miembros que enfrentan diversos desafíos, incluidos problemas de salud física y mental.

Puedo dar fe de que el impacto del sindicato, tanto en mi trayectoria profesional como en mi vida personal, me ha cambiado la vida. El acceso a atención médica y beneficios ofrece tranquilidad al saber que mi familia y yo estamos cubiertos ante eventos imprevistos. La disponibilidad de cursos de capacitación también ha sido fundamental para avanzar en mi carrera, permitiéndome crecer y prosperar dentro de la industria.

Pero lo que más me ha impactado es el sentido de camaradería y la aceptación que he encontrado en el sindicato. Como inmigrante, es inspirador ver la vibrante diversidad de nuestra hermandad y la inclusión cada vez mayor dentro de nuestras filas. El sindicato da la bienvenida a todos los que estén dispuestos a trabajar duro y mantenerse unidos, sin importar su raza, género, país de origen u orientación sexual. La orientación de mis hermanos y hermanas del sindicato me ha ayudado a superar cualquier obstáculo que se me presentaran, incluido el apoyo que me brindaron mientras perfeccionaba mis habilidades con el idioma inglés.

Me siento muy orgulloso de mis logros como oficial certificado y de las contribuciones que he hecho a la construcción de esta gran ciudad. De cara al futuro, me imagino continuando con mi apoyo y asesoría a la próxima generación de carpinteros. Insto a cualquiera que esté considerando unirse al sindicato a aprovechar la oportunidad no sólo de construir una carrera estable, sino también de ser parte de algo más grande que uno mismo: una hermandad unida que construye la ciudad más grande del mundo.

Miguel Ruiz es miembro del Consejo de Carpinteros del Distrito Local 45 de la Ciudad de Nueva York y miembro de la junta directiva del Club Latino.