Un grupo de activistas venezolanas denunció hoy en la Organización de los Estados Americanos (OEA) las violaciones a los derechos de los menores en su país, de las que consideran responsable al Gobierno de Nicolás Maduro.
En un documento de ocho páginas, repasan los 13 artículos de la Convención sobre los Derechos del Niño de las Naciones Unidas que, en su opinión, viola el Gobierno venezolano.
Entre ellos, los referidos a la vida, la alimentación, la atención sanitaria, la educación, la libertad de expresión o la no discriminación.
Lo firman las entidades Red Activista, que agrupa a venezolanas que viven en Washington, Virginia y Maryland; y la Family Services Network, una organización local que ayuda a familias con pocos recursos.
Las activistas María Brito, María Eugenia Guevara y Astrid Gamez presentaron el documento hoy al asesor de la Secretaría General de la OEA Gabriel Bidegain en la sede del organismo en Washington.
Bidegain, según explicaron tras el encuentro a los periodistas, les recomendó acudir al Instituto Interamericano del Niño, la Niña y Adolescentes (INN) de la OEA, así como a la Relatoría sobre los Derechos de la Niñez de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
«Queremos encender las alarmas, porque no se está hablando tanto del tema de los niños en el marco de la crisis de Venezuela», dijo Brito, de la Red de Activistas.
«Son niños que no pueden asistir a la escuela porque están enfermos o porque tienen que ir a hacer fila con sus familias a ver qué consiguen», apuntó Gamez, de Family Services Network.
Para Guevara, pediatra y miembro de la Red de Activistas, la comunidad internacional debe poner fin a una situación en la que los niños venezolanos «no pueden hacer lo que todos los demás: jugar, estudiar, ser felices».
En su informe, apuntan al hecho de que el abogado venezolano José Ángel Rodríguez Reyes sea miembro del Comité de los Derechos del Niño de la ONU y «en ningún momento» exponga las «graves violaciones» que se cometen en el país.
«No denuncia lo que pasa en Venezuela por ser aliado del régimen», opinó Brito.
Las activistas consideran que el abogado debe dimitir de su cargo si no denuncia la situación que viven los niños en Venezuela, algo sobre lo que «deberían presionar los otros Estados».
Después de visitar la OEA, llevarán sus denuncias a otros organismos competentes para llamar la atención sobre cómo afecta la crisis social y política venezolana a los más vulnerables, los niños.