Dos asociados de la pandilla MS-13 de Queens se declararon culpables el viernes en la corte federal de Brooklyn en relación con el notorio asesinato en 2018 de un adolescente en el parque Kissena de Flushing.
Como parte de sus declaraciones de culpabilidad, Juan Amaya-Ramírez, de 26 años, de Fresh Meadows, y Óscar Flores-Mejía, de 24 años, de Elmhurst, admitieron haber matado al adolescente de 17 años Andy Peralta de Corona para demostrar su dedicación y obtener la membresía completa en la pandilla callejera transnacional Mara Salvatrucha, conocida en Nueva York y en los Estados Unidos como MS-13.
Según documentos judiciales, Amaya-Ramírez, conocido también como «Cadáver», y Flores-Mejía, conocido en las calles como «Chamuco», junto con un tercer asociado no identificado de MS-13, planearon matar al adolescente de Corona porque pensaron erróneamente que un tatuaje de una corona en su pecho significaba que era miembro de la pandilla rival 18th Street.
Reclutaron a la entonces novia de Amaya-Ramírez, Leyla Carranza, para atraer a Peralta al parque Kissena para que pudiera ser asesinado. Carranza, de 23 años y de Richmond, Virginia, se comunicó con Peralta a través de las redes sociales y finalmente lo convenció de encontrarse con ella en el parque el 23 de abril de 2018. Una vez dentro del parque, Peralta fue confrontado por los tres hombres, quienes lo atrajeron a una zona boscosa donde lo golpearon, apuñalaron y estrangularon hasta matarlo. Después del asesinato, Amaya-Ramírez tomó fotografías de sí mismo y de sus cómplices mostrando señales de mano de MS-13 sobre el cuerpo muerto de Peralta, que tenía heridas de corte en el tatuaje de la corona en su pecho.
“El asesinato sin sentido de Andy Peralta ejemplifica la crueldad casual de la violencia de MS-13, y con sus declaraciones de culpabilidad de hoy, los acusados reconocen su papel en este brutal evento,” dijo el Fiscal Federal Breon Peace. “Esta oficina y nuestros socios en la aplicación de la ley continuarán buscando justicia y seguridad para las víctimas y comunidades afectadas al responsabilizar a los miembros y asociados de MS-13 por sus terribles crímenes.”
Amaya-Ramírez y Flores-Mejía también admitieron crímenes, incluidos el acoso cibernético resultante en muerte, conspiración de asesinato en apoyo al crimen organizado y conspiración de asalto en apoyo al crimen organizado. Según los términos de sus acuerdos de culpabilidad, los acusados serán condenados a al menos 30 años de prisión y podrían ser condenados a cadena perpetua.
“Los investigadores del NYPD, en estrecha colaboración con nuestros colegas en la aplicación de la ley, se comprometen a seguir incansables en la búsqueda de justicia contra los miembros de pandillas, donde y cuando sea que se cometan sus actos bárbaros,” dijo el Comisionado del NYPD Edward Caban. “Aplaudo y felicito a nuestros diversos socios federales por sus esfuerzos vitales, que finalmente dieron lugar al resultado exitoso de hoy.”
Carranza se declaró previamente culpable de acoso cibernético que resultó en la muerte de Peralta y enfrenta una sentencia máxima de cadena perpetua en la sentencia. Las declaraciones de culpabilidad son las últimas en una serie de procesos federales por la Oficina del Fiscal Federal para el Distrito Este de Nueva York dirigidos a miembros de MS-13. Desde 2003, cientos de miembros de MS-13, incluidos docenas de líderes de clicas, han sido condenados por cargos federales de crimen organizado por participar en asesinatos, intentos de asesinato y asaltos.
“La violencia despiadada de MS-13 no tiene límites. Las admisiones de asesinato de los acusados sirven como un recordatorio de cómo la naturaleza violenta de las pandillas callejeras resulta en muertes innumerables e innecesarias,” dijo el Agente Especial a Cargo Interino de Investigaciones de Seguridad Nacional de Nueva York, Darren McCormack. “HSI Nueva York y toda la comunidad de aplicación de la ley siguen comprometidos a interrumpir y desmantelar a MS-13 y otras pandillas violentas en apoyo a la seguridad pública en nuestras comunidades”.
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