Dr. Vincent H Bulus, promotor de esperanza y educación desde Long Island hasta Nigeria

Dr. Vincent H Bulus, promotor de esperanza y educación desde Long Island hasta Nigeria
Dr. Vincent H Bulus, promotor de esperanza y educación desde Long Island hasta Nigeria.  (Foto: Noticia)

 

“Los inmigrantes no debemos olvidar lo que dejamos atrás, en nuestros países”, destacó el Dr. Vincent H. Bulus, conferencista invitado a las Naciones Unidas el 21 de febrero para hablar sobre la situación que viven las mujeres y los niños en su país natal Nigeria, fundador de la entidad “Hope Yet” y un hombre convencido de que solo a través de la educación se puede cambiar la vida de muchas personas.

En el 2013 y después de haber terminado sus estudios en linguística, regresó a Nigeria para cumplir con una promesa que le hizo a su mamá antes de morir, “le prometí que haría la diferencia en la vida de las personas”, recalcó el Dr. Bulus.

Empezó entonces con un salón de clases para educar a 10 niños y actualmente, gracias a la ayuda de muchas personas en Nueva York, Long Island y El Bronx, su organización le brinda educación y agua de calidad a 300 niños, adicionalmente apoyo sicológico y moral a sus madres.

Así nació la fundación “Hope Yet”, traducida al español como “Todavía hay Esperanza”, pero traducida en Hausa, idioma nativo del Dr. Vincent, en dos partes: “esperanza para los que esperan” y “dar algo hermoso y significativo”.

“A diferencia de muchos niños en Nigeria, yo tuve la oportunidad de estudiar, mi madre me lo inculcó desde niño, desde muy pequeño supe que lo único que cambiaría mi vida, creciendo en un país como Nigeria, donde las mujeres son marginadas de la educación, era educarme”, comenta.

 

Dr. Vincent H Bulus, promotor de esperanza y educación desde Long Island hasta Nigeria
Dr. Vincent H Bulus, cambiando la vida de mujeres y niños en Nigeria. (Foto: Noticia)

 

Las costumbres nigerianas exigen que la mujer tenga la única responsabilidad de criar a sus hijos y atender las necesidades de su marido.

“Las mujeres en Nigeria simplemente no tienen voz”, destacó el Dr. Vincent y recalcó que los hombres en su país natal eligen con quien casarse y muchas veces escogen niñas de 9, 12 o 15 años para ser sus esposas y empezar a procrear hijos.

A través de su mamá, quien tuvo 12 hijos, y su madrastra que tuvo 6 hijos, se dio cuenta de la realidad que viven las mujeres en Nigeria. “Cuando empecé a crecer me costó trabajo comprender que ellas no pueden acceder a educación”, insistió.

De los 12 hijos que tuvo su mamá, 8 murieron por no tener las condiciones básicas necesarias para sobrevivir: una buena alimentación y servicios de calidad. Él, y una de sus hermanas, que es enfermera, lograron contrarrestar el sistema y educarse.

“Mi madre siempre me protegió y me dio esperanza para el futuro en medio de un sistema que condena a las mujeres solo a tener hijos”, dijo el Dr. Vincent, quien se graduó en 1995 en Teología de la Pontificia Universidad Urbaniana, en Roma, Italia.

 

Dr. Vincent H Bulus, promotor de esperanza y educación desde Long Island hasta Nigeria
Dr. Vincent H Bulus, promotor de esperanza y educación desde Long Island hasta Nigeria. (Foto: Noticia)

 

De East Rockaway al África

 

Es por eso que desde hace 10 años se encuentra en Estados Unidos, es uno de los sacerdotes de una iglesia católica en East Rockaway, condado de Nassau, donde ha podido conocer muchas personas, inclusive hispanas, que al saber de su obra, le traen donaciones y le ayudan para darle poder a esas mujeres y niños en Nigeria.

En el 2008, obtuvo una especialización en Educación Administrativa y liderazgo, de la Universidad St. Cloud en Minnesota, y en el 2012 un doctorado en educación de la Universidad de North Dakota. “Estoy convencido, y siempre que soy invitado a dar conferencias, lo digo, que solo la educación nos puede dar poder”, insistió.

Es la misma razón por la cual asegura que a través de su fundación “Hope Yet”, no solo se ha dedicado a reunir fondos para sus proyectos de educación y agua potable en Nigeria, también dedica su tiempo a orientar inmigrantes, “es importante hablarles, que ellos sepan de las leyes que deben regir en este país y como aprovechar positivamente el hecho de estar aquí”, dijo.

Esos mismos inmigrantes son los que el Dr. Vincent asegura, entienden la pobreza y las condiciones inhumanas en las que viven las mujeres y los niños en Nigeria.

Hasta ahora “Todavía hay Esperanza” ha logrado reunir fondos para brindar apoyo a las personas que tienen VIH en Nigeria, construir dos pozos motorizados de agua potable y ampliar los salones de clase, además de tener ya el terreno para lo que sería el próximo proyecto: la construcción de un hospital.

“Tenemos en Nigeria un grupo de profesionales que trabajan de la mano con la entidad para cambiar la vida de 300 niños y sus familias y desde aquí las personas pueden ayudar con algo mínimo como donar ropa, medicamentos o dinero, lo que pueda cada persona”, señaló.

Su obra continuará desde East Rockway en Long Island, y desde la sede principal en El Bronx, Nueva York. “Me eduque y seguí con mi doctorado para a través de la educación tener el poder de cambiar la vida de los demás, y es eso lo que todos los inmigrantes debemos, o estamos obligados a hacer”, puntualizó el Dr. Vincent.