El gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, criticó hoy al presidente Donald Trump, a quien acusó de «politizar» la tragedia de Manhattan con unos mensajes que Twitter que «no ayudan».
«Los tuits del presidente creo que no ayudaron y tampoco fueron objetivos. Creo que con ellos intentó apuntar a posibles culpables y politizar la situación (…) Sus tuits ni siquiera son exactos hasta donde tengo entendido», dijo Cuomo en una conferencia de prensa.
Poco después del atentado terrorista, Trump anunció a través de su cuenta de Twitter que había ordenado «endurecer» los vetos a ciudadanos extranjeros de varios países de mayoría musulmana, sin ofrecer ningún detalle.
Además, insistió hoy en la necesidad de cambiar el actual sistema de inmigración por otro «basado en el mérito», en referencia a las informaciones que apuntan a que el presunto autor del atentado llegó al país hace unos años gracias a una lotería de visados.
«Estamos luchando duro por la inmigración basada en el mérito, no más sistemas de lotería demócratas. Debemos ser MUCHO MÁS DUROS (y más inteligentes) (sic)», enfatizó el presidente en su cuenta de Twitter.
El gobernador demócrata insistió en que con ese tipo de mensajes en las redes sociales el presidente Trump «le está haciendo el juego a los terroristas» porque, a su juicio, solo «perturban, dividen y asustan» a la gente.
«El tono en estos momentos debería ser exactamente lo opuesto. No es el momento de hacer política, punto», añadió Cuomo en la misma rueda de prensa, acompañado del alcalde de la ciudad, Bill de Blasio, y el jefe de la policía de Nueva York, James O’Neill.
De Blasio, por su parte, criticó también los mensajes de Trump sobre el veto a ciudadanos extranjeros y volvió a poner encima de la mesa el debate que hay abierto en el país sobre la posesión de armas y la ausencia de leyes que lo limiten.
«Nosotros apoyamos que se pueda vetar a determinadas personas, pero no a grupos de gente solo porque pertenecen a un grupo, ni por su religión o por su país de origen», dijo al alcalde, también demócrata.
De Blasio aprovechó para recordar que el atentado de ayer vuelve a poner de relieve el debate sobre la violencia de las armas, aunque acto seguido dijo que ahora toca «mostrarse unidos» y ya habrá tiempo «para discutir».
Por su parte, el gobernador Cuomo dijo que es una «locura» el número de armas de asalto que hay en las calles del país y recordó que el estado de Nueva York ya aprobó una de las leyes más «inteligentes» sobre armas.
El atentado de Manhattan dejó ocho muertos y una decena de heridos, cuando un inmigrante uzbeko de 29 años, identificado como Sayfullo Saipov y que se encuentra detenido, presuntamente arrolló con una camioneta a varias personas.