El pasado14 de marzo, marcó un mes del tiroteo en la escuela secundaria de Parkland, Florida, -y a pesar de los horrores vividos ahí-, nuestros oficiales electos aún no han hecho nada para mantener seguros a nuestros niños en las escuelas.
La ineptitud no solo se limita a Washington, DC –donde la influencia económica de la Asociación Nacional del Rifle (NRA) parece impenetrable- o en la Florida, donde la Legislatura Estatal rechazó un bloqueo a las armas de asalto mientras los estudiantes de Parkland observaban desde la galería.
Aquí en Nueva York, los intentos por regular las armas siguen siendo bloqueados, como sucedió con la propuesta de Michael Gianaris, que impulsaría los chequeos de antecedentes penales para compradores de armas.
Esto nos lleva a la pregunta: ¿de qué lado están los republicanos?
En una declaración hecha después de una votación reciente, el líder de la mayoría del senado estatal John Flanagan, dijo que quiere escuelas más seguras para todos y dio una lista de ideas.
Entre ellas, dinero para cámaras de seguridad, endurecimiento de las entradas, asignación de oficiales armados para cada escuela, botones de pánico en los salones, mejores planes de respuesta y un incremento en los servicios de salud mental.
“Todas las opciones responsables están en la mesa”, dijo Flanagan. No obstante, es increíble cómo no mencionó que ‘todas las opciones responsables” estaban menos una: mejores leyes de control para mantener las armas de fuego fuera del alcance de las personas equivocadas.
Esas ideas son curiosamente similares a lo que la NRA ha estado declarando desde el trágico hecho sucedido en Parkland, el viejo dicho “que las armas no matan a las personas…”, reforzado por una apelación a medias por mas patrullaje armado en escuelas.
Al parecer, más armas, como siempre, es la solución a nuestros problemas –aunque está muy claro que más bien es la causa del problema.
Newsday reportó que la NRA ha donado alrededor de 175 mil de dólares en la última década a los partidos republicano y conservador del estado, así como a sus candidatos. Flanagan, y la gente del partido, dicen que estas contribuciones no tienen nada que ver con las decisiones que toman en Albany.
Nosotros, preferimos dejarlo a criterio de nuestros lectores para que decidan si quieren darles el beneficio de la duda.
Sin embargo, cada día se hace más claro que si queremos verdaderos cambios en las leyes, necesitamos hacerlo por nosotros mismos.
Asimismo, todos debemos demandar a nuestros oficiales electos a que voten por leyes más estrictas de control de armas y escuelas más seguras.
Si nuestros líderes locales no hacen nada para que esto suceda, entonces nosotros tenemos una responsabilidad de votar en noviembre para sacarlos de los puestos públicos.