En una jornada histórica para la comunidad inmigrante, el Gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, firmó la Ley de Privacidad y Acceso a la Licencia de Conducir (Green Light NY) que apenas unas horas antes había sido aprobada por el Senado estatal, durante unas candentes votaciones en la tarde y noche del lunes en la Legislatura de Albany.
Se estima que esta ley tardará 180 días en entrar en vigor y las primeras licencias estarían disponibles para los solicitantes en el mes de diciembre, beneficiando así a más de 750 mil residentes neoyorquinos y generando más de 57 millones de dólares para la economía local.
De esta manera Nueva York se une a la lista de los 12 estados del país, Puerto Rico y el Distrito de Columbia que ya han promulgado leyes que permiten a los inmigrantes indocumentados salir de las sombras y obtener una licencia para poder manejar sus vehículos de forma legal, ir a sus trabajos, llevar a sus hijos a las escuelas y desarrollar todas sus actividades productivas sin el peligro de ser arrestados y puestos en el camino de una deportación.
Cabe indicar que el lunes el senado de Nueva York aprobó este proyecto de ley Luz Verde que tiene el gran objetivo restaurar el acceso de las licencias de conducir a todos los neoyorquinos sin importar su estatus migratorio.
La medida se aprobó tras un intenso proceso entre los senadores estatales, con 33 votos a favor superando a los 29 votos en contra.
Según se pudo conocer los senadores del área de Long Island eligieron votar por el NO a la ley Green Light NY haciendo caso omiso a los miles de pedidos de sus votantes y de los miembros de la comunidad en los condados de Nassau y Suffolk, quienes viven en carne propia la necesidad de contar con una licencia de conducir para poder mantener a sus familias.
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