La historia se repitió, la combinación del base Stephen Curry, el ala-pívot Draymond Green con el escolta Klay Thompson, y un banquillo de oro, los Golden State Warriors remontaron una desventaja de 17 puntos y vencieron a domicilio 117-119 a los Portland Trail Blazers en la prórroga del cuarto partido de las finales de la Conferencia Oeste que barrieron 4-0 al mejor de siete.
Los Warriors, con el triunfo logrado, a pesar de la ausencia del alero estrella Kevin Durant y el pívot DeMarcus Cousins, les permitió alcanzar las Finales de la NBA por quinta vez consecutiva, primer equipo que lo consigue en la Oeste en la historia de los playoffs, y defenderán el título de bicampeones.
Curry esta vez no sólo fue el líder encestador, también en todas las facetas del juego al concluir el partido con un triple-doble de 37 puntos, 13 rebotes y 11 asistencias.
La inspiración encestadora de Curry permitió a los Warriors remontar otra desventaja importante como sucedió en el tercer partido que estuvieron abajo 18 puntos en el marcador y otros 17 en el segundo, que jugaron en su campo del Oracle Arena.
Mientras que Draymond Green repitió por segundo partido consecutivo otro triple-doble, el octavo que ha logrado como profesional en los playoffs, al aportar 18 puntos, incluido el triple que a falta de 39,6 segundo para el final de la prórroga puso el parcial de 115-119, que ya no sería superado por los Trail Blazers.
Green, que ha recuperado su mejor nivel de forma, también aportó 14 rebotes -todos defensivos-, repartió 11 asistencias, recuperó tres balones, perdió seis, y puso dos tapones.
Ambos se convirtieron en los primeros jugadores compañeros que en un mismo partido de los playoffs en la historia de la NBA consiguieron sendos triples-dobles.
Por su parte, Klay Thompson, aunque tuvo problemas de personales y volvió a estar inconsistentes en los tiros a canasta, falló 14 de 21, incluidos 7 de 10 triples, al final aportó 17 puntos y seis rebotes, como tercer máximo encestador de los Warriors, en una lista de seis jugadores que tuvieron números de dos dígitos.
Además, Thompson, a falta de 1:48 minuto para el final del tiempo reglamentario anotó el triple que permitió a los Warriors poner el empate (111-111) en el marcador, que ya no se movió y que forzó la prórroga.
Los Warriors, como equipo, acabaron con 47 (46-99) por ciento de acierto en los tiros de campo, el 30 (12-39) de triples y el 79 (15-19) desde la línea de personal, además de dominar bajo los aros con 56 rebotes, comparados a los 38 de los Trail Blazers, que fueron los que al final les costó la derrota.