Las guarniciones son el complemento perfecto para cualquier cena del Día de Acción de Gracias, añadiendo variedad y sabor al encuentro. Estas recetas harán que cada bocado sea memorable y convertirán tu mesa para celebrar.
El Día de Acción de Gracias – Thanksgiving – es la ocasión perfecta para reunirse en familia y dar gracias, pero también para deleitarse con una comida para acompañar buenos momentos. Si bien el plato principal se lleva gran parte de la atención, las guarniciones son las que complementan el banquete y le dan ese toque especial. Aquí te ofrecemos una selección de las mejores acompañamientos, desde clásicos imprescindibles hasta versiones creativas, para acompañar tu festín y elevar tu mesa de Acción de Gracias a otro nivel.
Pure de Batata con Queso Feta y Arándanos (acompañamiento): Aunque el pavo siempre es el protagonista en el día de Acción de Gracias, la batata no se queda atrás. Tienes que preparar esta receta y sorprender a tus seres queridos. El queso feta eleva el sabor de este puré y estamos seguros que todos van a querer repetir.
Ingredientes
3 batatas grandes peladas y cortadas en cubos (alrededor de 6 tazas)
4 cucharadas de mantequilla
1/2 taza de crema batida espesa
1/4 taza de queso feta desmenuzado
1/8 taza de arándanos secos
1 cucharada de miel
Preparación
Pon a hervir una olla grande de agua con sal.
Mientras tanto, pela y corta en cubos las batatas.
Agrega las batatas a la olla de agua hirviendo y cocina hasta que estén tiernas alrededor de 10-15 minutos. Escurre y transfiere a un tazón para mezclar.
Mientras las batatas están hirviendo, agrega la mantequilla y la crema espesa para batir a una olla pequeña a fuego lento para derretir la mantequilla y calentar la mezcla.
Usando un majador de papas o una batidora eléctrica, combina la mezcla de mantequilla tibia con las batatas hasta alcanzar la consistencia deseada.
Transfiere el puré de batatas a un tazón para servir y cubre con el queso de cabra desmenuzado y los arándanos.
Rocía con la miel y sirve tibio.
Gratinado de Coliflor con Ajo Asado (acompañamiento): ¡Queso, queso y más queso! Este gratinado cremoso de coliflor es una suave melodía para el paladar. Si tienes invitados en casa o si eres invitada, esta receta es para ti.
Ingredientes
1 ajo de cabeza mediana
3 cucharadas de aceite de oliva
1 coliflor de cabeza grande cortado en floretes del tamaño de un bocado
Sal kosher al gusto
2 cucharadas de mantequilla sin sal
2 cucharadas de harina para todo uso
2 tazas de leche entera
1 cucharada de tomillo fresco finamente picado y más para decorar
4 onzas de queso crema a temperatura ambiente
3/4 taza de queso cheddar blanco fuerte rallado, cantidad dividida
Pimienta negra recién molida al gusto
1/4 taza de queso parmesano
Preparación
Precalienta el horno a 400 F. Cubre ligeramente una cacerola mediana con mantequilla. Corta la parte superior de la cabeza del ajo dejando al descubierto la parte superior de los dientes y colócalos en un cuadrado de papel de aluminio. Rocía 1 cucharada de
aceite de oliva sobre la cabeza de ajo y envuélvelo bien con papel aluminio. Asa en el horno hasta que estén tiernos, 30-40 minutos. Retira del horno, desenvuelve el papel de aluminio y deja enfriar. El ajo asado se puede preparar por 3 días y almacenar tapado
en el refrigerador.
Mientras tanto mezcla los cogollos de coliflor en el aceite de oliva restante y sazona con sal. Extiende sobre una bandeja para hornear con borde y asa el coliflor junto con el ajo en el horno durante 15-20 minutos hasta que estén dorados. Transfiere a un recipiente
para hornear preparado.
Derrite la mantequilla en una cacerola mediana a fuego medio. Exprime aproximadamente la mitad de los dientes de ajo asados en la mantequilla y machácalos con una cuchara para romperlos. Espolvorea harina sobre la mantequilla y revuelve para combinar. Cocina
1 minuto hasta que estén dorados y luego agrega lentamente la leche. Reduce el fuego a medio-bajo y continúa batiendo hasta que espese de 3 a 5 minutos.
Cuando la salsa esté lo suficientemente espesa como para cubrir una cuchara, retírala del fuego y mezcla el tomillo, el queso crema y 1/2 taza de queso cheddar hasta que quede suave. Sazona con sal y pimienta al gusto.
Vierte la salsa de crema sobre el coliflor en una fuente para hornear y espolvorea con el resto del queso cheddar y parmesano. Hornea sin tapar hasta que el queso esté dorado y burbujeante de 15 a 20 minutos. Adorna con tomillo y sirve caliente.
Recetas: Savor Recipes
Edición: Nahuel Leto
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