El fiscal de distrito del condado de Suffolk, Raymond A. Tierney, informa que un hombre de origen hispano, identificado como Joaquín Orantes Franco, de 42 años y residente de Brentwood, fue acusado de posesión criminal de un arma, imprudencia temeraria y otros cargos relacionados, por presuntamente disparar en una casa ocupada por su novia y varios miembros de su familia después de que ella le dijera que no quería mudarse con él.
«Las acusaciones en este caso representan un acto atroz de violencia doméstica que puso en riesgo vidas inocentes», dijo el fiscal Tierney. «Nuestra oficina se toma muy en serio los actos de violencia doméstica, en particular los que involucran armas de fuego y ponen en peligro a los niños».
Según la investigación, el 20 de octubre de 2024, la víctima y sus dos hijos estaban visitando a sus padres en su casa de Central Islip. Mientras estaban dentro de la residencia con varios miembros de la familia, incluidos al menos 5 niños, los ocupantes escucharon un fuerte estruendo desde afuera.
Uno de los residentes de la planta baja corrió escaleras arriba para informar que una bala se disparó en el primer piso de la casa, atravesó varias paredes, un televisor y el dormitorio de un niño. La bala estuvo a punto de alcanzar a uno de los ocupantes adultos que en ese momento estaba viendo un programa en la televisión.
Había varios niños pequeños quienes estaban jugando en el apartamento de la planta baja cuando la bala atravesó las paredes. Las imágenes de vigilancia de la casa capturaron el tiroteo, y la familia supuestamente pudo ver que el tiro provenía de la camioneta de Orantes Franco, que se alejó de inmediato.
Después de una investigación, la policía localizó a Orantes Franco y una pistola semiautomática de 9 mm que estaba con un cargador de alta capacidad con un cartucho real atascado en la recámara.
Los miembros del Departamento de policía del condado de Suffolk (SCPD) realizaron una búsqueda en la camioneta de Orantes Franco y encontraron un cartucho de pistola activo y un casquillo de cartucho gastado. Se examinó la pistola de 9 mm y se determinó que no tenía número de serie.
El lunes 18 de noviembre, Orantes Franco fue procesado por la acusación formal ante el juez interino de la Corte Suprema, Richard I. Horowitz, por cuatro cargos de posesión criminal de un arma; un cargo de imprudencia temeraria; y cuatro cargos de poner en peligro el bienestar de un niño.
El juez Horowitz ordenó que Orantes Franco permaneciera detenido con una fianza de $100,000 en efectivo, $250,000 o $1,000,000 de fianza parcialmente garantizada mientras el caso estuviera pendiente. El acusado debe regresar a la corte el 19 de diciembre de 2024 y enfrenta 15 años de prisión si es declarado culpable del cargo principal.
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