La selección de Honduras ha mostrado mejoría en sus más recientes cinco partidos, que ganó, pero su entrenador, el uruguayo Fabián Coito, asegura que aún falta contundencia para hacerse sentir con más peso ante los rivales.
Sus dos triunfos más recientes, uno de visita y otro en casa, Honduras se los ganó a Trinidad y Tobago por 0-2 y a Martinica por 1-0, respectivamente, resultados que ya le aseguraron su pase a la próxima Copa Oro, que se disputará en 2021 en Estados Unidos.
Asimismo, con los triunfos ante los dos países caribeños la “H” selló su boleto a la semifinal de la Liga de Naciones de la Confederación Norte, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (Concacaf).
Este domingo, jugando en el Estadio Olímpico Metropolitano, de San Pedro Sula, los “catrachos” pudieron haberle ganado a Martinica por una mayor diferencia de goles, pero a sus delanteros les faltó justo lo que dice su timonel: contundencia.
El solitario 1-0 del marcador se selló gracias a una anotación en contra de Romario Barthelery. Apenas cuatro minutos al arrancar el partido, Alberth Elis se liberó de su marca por la banda y mandó la pelota al área.
Brayan Moya tomó un toque agresivo, bajó la pelota y disparó hacia el arco. Berthelery fue por el despeje, pero empujó la pelota sobre la línea, que terminó como un gol tempranero.
Poca Contundencia
La carencia de poder ofensivo en Honduras ya se había evidenciando tanto en Trinidad y Tobago como en casa, pero el técnico Coito confía en que los jugadores irán mejorando, principalmente los que militan en el exterior.
El seleccionador de Honduras considera que la selección va «encontrando una idea de asociación», en un grupo conformado en su mayoría por jóvenes, quienes necesitan de la experiencia de veteranos como Maynor Figueroa, el capitán, de 36 años, y Emilio Izaguirre, de 33, ambos defensas. Figueroa e Izaguirre fueron mundialistas en Sudáfrica 2010 y Brasil 2014.
Los otros tres partidos, no oficiales, que ganó la selección hondureña de la mano del “charrúa” Coito, fueron contra El Salvador (4-0), el 5 de junio; Puerto Rico (4-0), el 5 de septiembre, y Chile (2-1), el 10 de septiembre.
Contra los salvadoreños y boricuas, los hondureños anotaron cuatro goles en cada partido por la facilidad que dieron los rivales, pero pudieron haber convertido más.
Después de los encuentros contra Trinidad y Tobago y Martinica, Coito expresó que estaba satisfecho porque se logró el objetivo de ganar y asegurar el boleto a la Copa Oro, pero lamentó la poca cosecha goleadora.
Tras enfrentar a Martinica el uruguayo recalcó que cuando se va ganando 1-0 «no es ventaja», porque es un marcador que crea «nerviosismo», lo que «el rival va viendo».
Los partidos de vuelta contra Martinica y Trinidad y Tobago se jugarán el 14 y 17 de noviembre próximo.
Jugadores como los legionarios Bryan Acosta, Bryan Moya y Albert Elis, ligados al fútbol de los Estados Unidos; Rigoberto Rivas, en Italia, y Jonathan Rubio y Brayan Róchez, en Portugal, han llenado las expectativas de Coito, quien ha empezado a ilusionar a los hondureños con ver a su selección en el Mundial de Catar 2022, objetivo principal del técnico uruguayo.
