El 24 de octubre, el Contralor estatal Tom DiNapoli visitó a la Escuela Lexington de Sordos para publicar un informe titulado «Una instantánea económica del área metropolitana de Jackson Heights» que respalda esa premisa.
«La comunidad diversa y dinámica de inmigrantes de Jackson Heights es la fuerza impulsora detrás de la economía local que ha experimentado un crecimiento en el número de empresas, empleos e ingresos familiares», dijo DiNapoli. “A pesar del éxito económico del vecindario, quedan algunos desafíos. El área de Jackson Heights es una prueba viviente de los beneficios económicos y culturales positivos que la inmigración brinda a nuestras comunidades”.
Los inmigrantes representaron el 60 por ciento de la población del área en 2017, mucho más alto que en toda la ciudad (37 por ciento) y a nivel nacional (14 por ciento). Los inmigrantes también constituían más de las tres cuartas partes de los residentes empleados, la segunda proporción más alta entre los 55 vecindarios definidos por el Censo de la ciudad de Nueva York.
En 2018, había 3.300 empresas, 660 más que en 2009. Muchas son pequeñas tiendas minoristas y restaurantes que reflejan la diversidad del vecindario.
De los 102,300 inmigrantes en el área de Jackson Heights en 2017, los ecuatorianos fueron el grupo más grande que representó un quinto (20,8000) de la población inmigrante. Los dominicanos fueron el segundo grupo más grande (14,400), seguidos por los mexicanos (11,800), los bangladesíes, los colombianos, los peruanos, los chinos y los hindús también formaron parte significativa.
