Los frutos secos reducen riesgo de enfermedades cardiovasculares en diabéticos

Los frutos secos reducen riesgo de enfermedades cardiovasculares en diabéticos
Los frutos secos reducen riesgo de enfermedades cardiovasculares en diabéticos. EFE

 

Un mayor consumo de frutos secos, especialmente los arbóreos, puede reducir el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares en personas con diabetes de tipo 2 según una nueva investigación publicada en Circulation Research, una revista de la American Heart Association.

La diabetes de tipo 2 se asocia a un mayor riesgo de sufrir hipercolesterolemia, cardiopatías y accidentes cerebrovasculares. Además, supone un problema de salud muy extendido que afecta a más de 30 millones de estadounidenses.

Los frutos secos están repletos de ácidos grasos insaturados, sustancias fitoquímicas, fibra, vitaminas como la E o el folato, así como minerales, entre los que se incluyen el calcio, el potasio y el magnesio.

En este último estudio, los investigadores usaron cuestionarios sobre la dieta, facilitados por los propios participantes, de 16 217 personas, entre hombres y mujeres, diagnosticados con diabetes de tipo 2 y a los que se les preguntó sobre su consumo de frutos secos arbóreos durante un período de varios años.

Durante el seguimiento, se produjeron 3336 casos de enfermedades cardiovasculares (incluidos 2567 casos de enfermedades coronarias y 789 de accidentes cerebrovasculares) y 5682 muertes (incluidas 1663 muertes por enfermedad cardiovascular y 1297 muertes por cáncer).

“Nuestros hallazgos son una nueva prueba que refuerza la recomendación de incluir frutos secos en los hábitos dietéticos saludables para la prevención de complicaciones por enfermedades cardiovasculares y muertes prematuras entre personas con diabetes”, afirma el autor principal del estudio Gang Liu, Ph.D., investigador en el campo de las ciencias nutricionales de Harvard T.H. Chan School of Public Health de Boston, Massachusetts.

Además, incluso en aquellas personas que ya tenían hábito de comer frutos secos antes de ser diagnosticadas con diabetes, el aumento de la cantidad de frutos secos en su dieta demostró ser beneficioso en cualquier fase o edad. “Parece que nunca es demasiado tarde para mejorar la dieta y el estilo de vida de las personas diagnosticadas con diabetes de tipo 2”.

Asimismo, se estableció una fuerte asociación entre los frutos secos arbóreos, como las nueces, las nueces de Brasil, los anacardos, los pistachos, las nueces pecanas, las nueces de macadamia, las avellanas o los piñones, y un menor riesgo cardiovascular en comparación con los cacahuetes. Estos son, en realidad, legumbres porque, a diferencia de los frutos secos arbóreos, crecen bajo tierra.