Arturo De Jesús es un inolvidable líder en la comunidad hispana de Long Island, un inmigrante mexicano que siempre estaba dispuesto ayudar al prójimo desde su posición de próspero empresario local, forjado con mucha humildad y años de trabajo y dedicación.
En nuestro especial del Mes de la Herencia Hispana honramos su memoria y a poco más de un mes de su inesperada partida, destacamos que su legado de amor y solidaridad seguirán vigentes para apoyar las causas nobles.
De Jesús deja una huella profunda, fue un ser humano realmente dadivoso, con gran corazón, identificado con las necesidades sociales de las distintas comunidades latinas, especialmente de su querido México.
Fue una persona íntegra, hombre exitoso en sus negocios de jardinería, bodega y taquería en las áreas de Southampton y Riverhead, en el condado de Suffolk. Un personaje con quien se podía conversar porque sabía escuchar.
«Es algo muy especial, que nos llena de orgullo, que se tomen el tiempo para honrarlo, estamos todos muy agradecidos», nos dice Guadalupe Hernández, la amada esposa de Arturo De Jesús fallecido repentinamente el pasado 2 de septiembre a los 51 años de edad.
Él fue un amoroso compañero de vida, un entregado padre para sus hijas Jeny, Kimberlyn, Ester y su hijo Arthur, y un consentidor abuelo para sus nietos Michael, Amelia y Andrea.
«Lo recuerdo como un hombre luchador, de muy buen corazón, siempre dispuesto a ayudar a la gente y a donar nuestro tiempo o comida por medio de nuestros negocios, en lo que él pudiera siempre estaba ahí para ayudar a todos, sin esperar nada a cambio», enfatiza doña Guadalupe, quien conoció a De Jesús en el año 1986, en su natal pueblo de San Jerónimo Coyula, Atlixco, en el estado de Puebla.
Luego ellos unieron sus vidas en matrimonio y emprendieron la aventura de cruzar la frontera y materializar sus sueños en los Estados Unidos a base de esfuerzo y tesón diario.
Así desde 1992, De Jesús trabajaba lavando platos y repartiendo comida en Manhattan, Nueva York, para posteriormente con la experiencia ganada y el espíritu fortalecido, mudarse a Long Island en 1995.
En el condado de Suffolk fundó su primera empresa Arturo’s Landscaping, embelleciendo los jardines de los Hampton Bays. En 2010 estableció su segundo negocio, De Jesus Deli & Grocery en Southampton.
Y en 2017 comenzó su tercera empresa, De Jesus Taqueria en Riverhead, todos emprendimientos muy exitosos donde laboraba junto a su familia y daba empleo a otros inmigrantes que como él llegan a este país cargados de ilusiones y con ganas de salir adelante.
«Arturo ayudaba a la comunidad con donaciones en las escuelas, para fondos contra el cáncer, eventos de caridad, organizaciones y actividades», indica la señora Guadalupe.
Asimismo, él auspició a medios de prensa hispanos como Noticia, participó activamente en ferias masivas como SUMAQ Peruvian Food Festival, incluso difundiendo su herencia mexicana con orgullo a través de la pantalla grande de Telemundo.
Ahora tras la sentida muerte de Arturo De Jesús, su ejemplo de líder comunitario y apoyo solidario en Long Island seguirán presentes con el trabajo que continuará su familia.
«Por supuesto, lo tenemos bien claro, siempre que nos pidan ayuda vamos a estar ahí dispuestos, la familia siguiendo el legado que él empezó, en su honor vamos a seguir con todo lo que tengamos que hacer», recalca su esposa Guadalupe.
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