Miles de tejanos intentaban escapar las inundaciones del huracán Harvey, pero Donald Trump estaba ocupado en priorizar otras cosas.
El domingo, Trump reiteró en Twitter la necesidad del muro en la frontera y una vez más dijo que los mexicanos pagarán por él.
En cambio, México se ha comprometido en ayudar a Texas con esfuerzos de rescate y asistencia. La Secretaría de Relaciones Exteriores de México le respondió a Trump con un comunicado de prensa: “Nuestro país no pagará, bajo ninguna circunstancia, por un muro”. También dijo: “El gobierno de México aprovecha esta oportunidad para expresar su plena solidaridad con el pueblo y el gobierno de los Estados Unidos por los daños causados por el huracán Harvey en Texas”.
El congresista Henry Cuellar, por el Distrito 28 de Texas, aseguró que recibió una llamada por parte del Secretario de Gobernación de México, Miguel Angel Osorio Chong, y el Coordinador Nacional de Protección Civil de México, Luis Felipe Puente, donde le ofrecían apoyo.
“Me aseguraron que Texas está en sus pensamientos y oraciones y que México está comprometido a ayudar a Texas de cualquier manera que puedan”, dijo Cuellar. “Agradezco sus palabras y reconozco la importancia de tener buenos vecinos y aliados al momento de comenzar a reconstruir todas las áreas afectadas en Texas”.
Esta no será la primera vez que México le ayuda a la gente americana durante un desastre natural. Miembros del ejército mexicano llegaron a Nueva Orleans en el 2005 durante el huracán Katrina, que dejó más de 1,500 víctimas mortales.
Alrededor de 200 soldados, médicos y enfermeros cruzaron la frontera en septiembre de 2005. Su misión de rescate en Nueva Orleans duró dos semanas. Las unidades militares mexicanas no habían pisado terreno americano desde la guerra entre ambos países en el siglo XIX.
La retórica anti-inmigrante de Trump es tan severa que muchos se preguntan si permitirá la ayuda de México para los desastres naturales en el futuro.