El pasado viernes, la atmósfera chic de Rampoldi en Manhattan se llenó de emoción cuando se desarrolló el último desfile de moda latino, reuniendo a una vibrante mezcla de diseñadores y modelos para celebrar su rica herencia cultural. El evento fue una fusión de estilos tradicionales latinoamericanos y tendencias modernas, haciendo una poderosa declaración sobre identidad, diversidad y el futuro de la moda.
Más de 50 invitados disfrutaron de las increíbles obras de 4 diseñadores de origen hispano, quienes iluminaron la pasarela con patrones atrevidos, colores vibrantes y diseños innovadores.
El público, una mezcla de entusiastas de la moda y defensores culturales, aplaudió con entusiasmo mientras modelos e influencers de la comunidad latina desfilaban en atuendos que fusionaban de manera hermosa la tradición y la innovación.
Miranda Miguel, una diseñadora salvadoreña conocida por su colección «La Latina» en la Semana de la Moda de París, se robó el espectáculo con su enfoque contemporáneo de las telas tradicionales, rindiendo homenaje a sus raíces salvadoreñas. Los vestidos fluidos, las piezas inspiradas en el streetwear y los accesorios contaron cautivadoras historias de migración y resiliencia, dejando al público asombrado.
El rosa, negro y dorado fueron los colores destacados de la colección de Miranda, elevando su herencia salvadoreña a nuevas alturas y deslumbrando a los invitados con sus bolsos y joyas.
La colaboración entre Eva Innocenti y Andrea Ayala mostró los estilos únicos de las dos diseñadoras salvadoreñas, con la estética delicada y femenina de Andrea brillando en su trabajo conjunto. El lema de su marca, «Lleva amor donde vayas», resonó con la audiencia, alentando a las mujeres a abrazar el amor y la confianza en sí mismas a través de sus elecciones de moda.
El diseñador peruano José Zafra, conocido por vestir a la ganadora de concursos de belleza Camila Escribens en 2023, impresionó al público con su colección que presentó colores llamativos como el rojo y el azul, un testimonio de su visión y su dedicación a elevar a su comunidad latina a través de la moda.
Este innovador desfile de moda es parte de un movimiento para amplificar las voces latinas en la industria de la moda, desafiando las normas del sector y afirmando el lugar que la cultura latina merece en la conversación principal sobre moda.
A pesar del creciente talento latino, la industria de la moda aún enfrenta dificultades con la representación. Solo el 4,3 % del Business of Fashion 500 de 2017—que destaca a las figuras más influyentes en la moda—estaba compuesto por latinos, con nombres como la diseñadora uruguaya Gabriela Hearst, la modelo puertorriqueña Joan Smalls y el fotógrafo Mario Testino. Eventos como este ofrecen una plataforma para que los diseñadores latinos desafíen la subrepresentación que persiste en la moda convencional y eleven sus voces en el escenario global.
El Instituto del Vestido del Met revela que solo una fracción de su colección de 33,000 piezas cuenta con diseños de creadores latinos, destacando la continua omisión de las contribuciones no blancas a la moda. Eventos como este son importantes para dar visibilidad a los diseñadores latinos y desafiar la narrativa eurocéntrica que ha eclipsado durante mucho tiempo la historia de la moda.
“Muy agradecida por la contribución de los diseñadores. Esperamos que esta gran celebración continúe a lo largo de los años para seguir contribuyendo a nuestra comunidad latina”, expresó Sobeidy Vidal, fundadora y CEO.