La NBA enciende emociones. Tercer derbi neoyorquino para Jordi Fernández y tercera derrota para el técnico español, ya que sus Brooklyn Nets estuvieron a punto de dar la campanada pero finalmente cayeron por 95-99 ante unos New York Knicks que jugaron con fuego y estuvieron a nada de quemarse.
Fernández se estrenó en los cara a cara entre Nets y Knicks con dos enfrentamientos en noviembre en el Madison Square Garden. En el primero Brooklyn acarició una remontada memorable tras ir 21 puntos abajo pero perdió por 124-122 y en el segundo sí fue notablemente inferior y terminó sucumbiendo por 114-104.
Solo han pasado dos meses, pero desde entonces los Nets (14-30) se han centrado por completo en la reconstrucción de su proyecto, han sufrido cuatro derrotas seguidas y un 5-20 en sus últimos 25 encuentros, han colocado en el mercado a sus piezas más valiosas (ya se marcharon Dennis Schröder y Dorian Finney-Smith) y tienen la vista puesta en conseguir la posición más alta posible del draft
Pese a todo, los de Fernández pusieron en mil y un problemas en Brooklyn a unos Knicks (29-16) que sí aspiran a lo más alto pero que siguen nadando entre la irregularidad y las dudas, lejos por sensaciones de los Cleveland Cavaliers (36-6) y los Boston Celtics (30-13).
Fue un triunfo feo y en ‘back-to-back’, pero este fue el tercer partido (2-1) de una serie de ocho seguidos que los Knicks jugarán en Nueva York. Siete de ellos serán como local y solo uno (el de esta noche) como visitante en Brooklyn, un tramo favorable del calendario que les debería servir para recuperar confianza.
El dominicano Karl-Anthony Towns lideró a los Knicks con 25 puntos, 16 rebotes y 6 asistencias. Jalen Brunson (17 puntos), OG Anunoby (20 puntos) y Josh Hart (7 puntos, 12 rebotes y 9 asistencias) fueron fundamentales en el desenlace mientras que Mikal Bridges, en su primer encuentro en Brooklyn tras cambiar los Nets por los Knicks, se quedó en 10 puntos con un pobre 3 de 12.
Por los Nets, los mejores fueron D’Angelo Russell (23 puntos y 10 asistencias), Cam Johnson (16 puntos), Tyrese Martin (13 puntos y 7 rebotes) y Nic Claxton (8 puntos y 12 rebotes). Los Nets perdieron 17 balones en un encuentro de poco acierto en el triple (12 de 40 en Brooklyn, 8 de 28 en Nueva York).
Demasiado sufrimiento
Un 5-15 en cuatro minutos, con los Knicks dominando ambos lados de la cancha, parecía anunciar una noche complicada para los Nets. Pero el conjunto de Fernández reaccionó, Cam Johnson sumó 7 puntos y Brooklyn cerró el primer cuarto mandando (26-24) ante unos Knicks atascados de repente.
Demasiado relajados, los Knicks se pusieron las pilas en el segundo capítulo. Ahí aparecieron Miles McBride y Precious Achiuwa, que reactivaron a su equipo justo antes de que Towns, con un dos más uno, recuperara el +10 (31-41 con 7.44 por jugarse).
Pese a tramos irregulares y descuidados de los Knicks, daba la impresión de que los visitantes -con muchísimos de sus fans esta noche en las gradas de Brooklyn- podían romper el encuentro en cualquier momento.
No lo hicieron antes del descanso pero mantuvieron el duelo bajo control (51-59). Towns se hizo gigante antes del intermedio (14 puntos y 8 rebotes) y Bridges se mostró activo pero desaparecería en la segunda mitad (10 puntos).
En los Nets, que sufrieron 9 pérdidas de balón en la primera parte, los mejores fueron Cam Johnson y Russell con 12 puntos por cabeza.
A Tom Thibodeau no le gustó nada la reanudación. Rebotes ofensivos permitidos, triples de sus rivales, errores de concentración… Los Knicks salieron dormidos y los Nets lo aprovecharon (62-66 con 8.12 en el reloj).
La llamada de atención surtió efecto y un parcial de 2-10, con Towns tirando del carro, extendió el margen para los de Manhattan (64-76 a falta de 4.46), pero tampoco entonces lograron distanciarse por lo que los Knicks, que concedieron 9 rebotes ofensivos, llegaron con un 75-84 al último cuarto.
En cuadro y muy limitados de talento, los Nets no arrojaron la toalla. Su defensa se vino arriba, el ataque de los Knicks fue un desierto (3 puntos en nueve minutos) y un triple de Keon Johnson completó la remontada de Brooklyn (88-87 con 5.18 para el final).
Con demasiado sufrimiento para un duelo que parecía mucho más sencillo, los Knicks tuvieron que encomendarse a Brunson (8 puntos en los últimos minutos) y la defensa y el trabajo multiusos de Anunoby y Hart.
Aun así, Cam Johnson tuvo un triple frontal para haber colocado a Brooklyn por delante a falta de 15 segundos pero su fallo permitió que los Knicks respiraran y sellaran su noveno triunfo seguido ante los Nets.
(Con reporte de David Villafranca, de EFE)
