En el Mes Internacional de la Mujer reconocemos a Adriana Devers de origen dominicano, residente de Westbury. Ella es una mujer exitosa en la comunidad de Long Island, en Nueva York. Es autora, educadora, gestora cultural. Cuenta con una licenciatura de pedagogía y tiene más de 14 años de experiencia docente bilingüe.
Devers es vicepresidenta de la organización Westbury Arts, miembro de la junta directiva de Latina Moms Connect, hace trabajos independientes (freelancer) de programas educativos en línea. Es fundadora de Cuentos de Triadas, organización cuyo enfoque es ofrecer educación a la comunidad. Y por si fuera poco, es propietaria del programa infantil «Tríadas» en el condado de Nassau.
Recientemente, en el marco del Día de la Independencia de la República Dominicana, Adriana Devers recibió un diploma de reconocimiento oficial de parte del ejecutivo de Nassau, Bruce Blakeman. En este evento celebrado en Mineola honraron su aporte a la comunidad local.
“Con el reconocimiento me sentí muy honrada, especialmente porque no me lo esperaba. Aprecio mucho que reconozcan mi trabajo y dedicación a lo que hago, pero más aún aprecio la oportunidad de poder compartir mis letras, llevando un mensaje positivo, esperanzador y cálido a las personas que me lean o me escuchen. Es bonito recibir y ser aplaudida, es más significativo el mostrarle a nuestras niñas que ellas también pueden soñar y esforzarse porque es posible llegar y hacer esos sueños una realidad», dijo Devers quien durante el evento de celebración a ¡Quisqueya la bella! exclamó unos de sus bellos poemas: «La negra del Batey».
¿Qué es lo que más te gusta de ser mujer?
«Lo que más me gusta de ser mujer es nuestra versatilidad, fuerza de espíritu y resiliencia. Somos seres mágicamente extraordinarios, capaces de alcanzar todo lo que nos proponemos. Somos sin duda alguna el pilar de la sociedad y cuando nos damos cuenta de esa magnificencia y de nuestras capacidades nos convertimos en seres imparables».
¿Cuál es tu mayor sueño en la vida?
«¿Mi mayor sueño? Antes me obsesionaba con ciertas cosas, tenía un regimen conmigo misma, fechas límites, cosas materiales que quería obtener y un sin fin de cosas. Ahora, siento que estoy viviendo mi gran sueño porque me he propuesto no depender de nada para sonreír. Me he propuesto agradecer día tras día, literalmente doy gracias por todo, las puertas que se cierran, las caídas, los logros, las alegrías, las tristezas. El hacer eso me ha abierto a otro mundo, a otra realidad. Vivo con el propósito de compartir algo positivo con las personas a mi alrededor, elijo bondad, doy de corazón, y suelto y confío. Cuando algo no funciona simplemente no insisto y el hacer eso me ha enseñado que cada día es parte de mi sueño, porque estoy en paz, estoy feliz, estoy agradecida. Trato al máximo de hacer lo que decía el conferencista Wayne Dyer: ‘tener una mente abierta a todo y apegada a nada'».
¿Qué le recomiendas a una mujer soñadora como tú?
«A las mujeres soñadoras les pido:
1. Sientan más amor y compasión por sí mismas. Como somos adentro somos afuera y si nos sentimos bien con nosotras mismas, eso es lo que vamos a proyectar.
2. Digan que NO con firmeza cuando sea necesario, no importa a quién o por qué. Simplemente «no puedo», «no, hoy estoy ocupada», «no es posible», «no me gusta», «NO y punto».
3. Aprecia tu cultura, reconociendo que hay hábitos culturales que son dañinos y que debemos reevaluar. Por ejemplo, el rol de la mujer en la sociedad. Si quieres ser madre excelente, o si no quieres serlo excelente también, cada una tiene el derecho a decidir su propia felicidad, sus anhelos. El imponer con eso de ‘a tu edad … o en nuestro país … o en nuestra familia’. Cada una tiene el derecho de ser quien quiere ser, con sus propias expectativas».
4. Aprecia la soledad. Para que existan las cosas primero tiene que existir la nada. Para apreciar la compañía debemos apreciar la soledad, para apreciar los sonidos debemos apreciar el silencio. Si aprendemos a darnos espacio y apreciar la soledad se nos hace más fácil el descubrir lo bello en las pequeñas cosas, nos convertimos en seres más intuitivos y sensibles.
5. Abraza todas tus emociones. ¿Quieres reír? Ríe; ¿Llorar? ¡Llora!; ¿Estás enojada? Dilo: «Estoy enojada porque…»; ¿Estás cansada de los quehaceres? ¡Exprésalo!. El enjaular nuestras emociones y sentimientos crea un hábito de culpabilidad y victimismo. Y ojo, estoy consciente de que las circunstancias de cada una es diferente, se trata de empezar pequeños cambios desde adentro y eso va creando un efecto positivo natural que nos ayuda a descubrir un nuevo yo, poco a poco.
¡Sé tú a tu manera! Sin pedir perdón ni permiso, simplemente encuentra tu grandeza y luego te será más fácil compartirla con los demás».
Orgullosamente Afro-Latinx
Adriana Devers se identifica así misma como afrolatina (Afro-Latinx). «En nuestros países de origen somos ‘dominicanos, salvadoreños, cubanos, etc.’ y al llegar a los Estados Unidos a los 13 años de edad fue cuando aprendí que ahora era ‘latina, hispana, otro’ … incluso me sentía confundida cada vez que tenía que marcar esa cajita. Ninguno de los términos me indentifican en su totalidad. Hoy me siento más conectada con mi herencia negra y orgullosa de ser afrodescendiente. Latinx es un término que busca ser más inclusivo pero que aún queda corto de todo lo que somos. Somos individuos en constante búsqueda de nuestra identidad, de pertenecer y ser sin prejuicio».
Los trabajos publicados de Adriana Devers son:
Poema «La negra del Batey» antología Mujeres de Palabra, Poética y Antología (2010).
Poemario «Huellas de una Memoria Perdida» (2008).
«Mi chiquita en luna llena», libro infantil bilingüe premiado por Latino Books Award en el 2019.
Libro de historias cortas «De cuento en cuento» (2019).
Libro infantil «¡Todos a brillar!» (2020).
Además, es co-autora del libro mejor vendido «Mujeres que se atreven y superan límites, historias de inspiración en tiempos difíciles» (2021).
Y autora del libro bilingüe infantil «Valentina Valente, ella es mi papá» (2022), su más reciente trabajo literario.
¿Qué mensaje le das a la comunidad que aún se asombra de ver a dos papás o a dos mamás?
«Nuevamente, esto va con nuestras creencias, y como siempre se nos han impuesto lo que es correcto o no, en base a los mandatos de ciertas entidades o grupos. Pienso en el valor del amor. El amor en realidad no tiene color, ni fronteras, ni excepciones, ni dice «yo te amo a ti, pero a ti no». Entiendo que cada individuo puede tener su propia perspectiva. En la mía, yo elijo bondad, elijo que el hacer sentir a alguien bien es más importante que el apegarme a creencias que juzgan o menosprecian a los demás. La diversidad familiar, es tan hermosa como la diversidad de razas, culturas, nacionalidades. Por eso el libro ‘Valentina Valente’ es tan importante para mí, porque reconoce que es momento de celebrar esa diversidad, apreciarla y reconocer que el amor incondicional es inclusivo, es honesto, es multicolor».
¿Qué mensaje le envías a las mujeres?
«A todas las mujeres de la comunidad las invito a creer más en sí mismas. A buscar dentro de su propio ser su magia, su por qué, su luz. Pues si encontramos en nosotras mismas lo que tanto anhelamos nos damos cuenta que no necesitamos de cosas ajenas, o de los demás, para ser felices. Todas somos capaces de grandes cosas, sin importar títulos, nivel de educación, posición económica, raza, etc., se trata de encontrar eso con lo que conectamos y ser constantes. También usar nuestra voz, pedir ayuda cuando la necesitamos y amarnos más».
«Cuando te levantes mañana, mírate al espejo y reconoce tu grandeza, abrázate, si llega un pensamiento de culpa o comentario negativo, da gracias y repite lo maravillosa que eres. Crear hábitos de aceptación y amor propio hacen una gran diferencia en nuestro diario vivir».
Usted puede encontrar la obra de Adriana Devers en su cuenta de Facebook e Instangram como: @AdrianaDevers .
- Más de Long Island : Condado de Nassau celebra el 178 aniversario de la Independencia de República Dominicana