Digna Cueto sabía exactamente lo que dejaba atrás: dos décadas de éxito en el comercio corporativo, cargos ejecutivos en marcas de moda reconocidas, y la seguridad de una carrera consolidada. Lo que no sabía era cómo su valiente decisión de emprender como dueña de un pequeño negocio y abrir una franquicia de preparación de impuestos ATAX en Woodside, NY, en 2018, transformaría no solo su trayectoria profesional, sino también su comunidad.
Como muchos nuevos propietarios de negocios, Cueto enfrentó varios desafíos, como la búsqueda de clientes, la gestión de su tiempo, y la necesidad de ajustar su planificación financiera. Sin embargo, no sabía a dónde acudir para obtener ese apoyo. Fue entonces cuando asistió a un evento de Chase for Business dirigido por el Consultor Senior de Negocios, Franco Riofrio. En ese momento, reconoció al instante cómo el programa podría beneficiar a su empresa. “Sabía que debía ser parte de ese programa”, comentó.
Este programa gratuito conecta a los propietarios de negocios con Consultores Senior de Negocios de Chase, quienes se dedican a asesorar a propietarios de pequeños negocios. Para calificar, los propietarios deben haber estado operando durante al menos dos años y generar ventas anuales mínimas de $100,000. Es importante destacar que el programa está abierto tanto a emprendedores que son clientes de Chase como a los que no lo son. “Queremos trabajar con empresas que ya hayan validado su concepto y se encuentren en fase de crecimiento”, explica Franco. “Nuestro objetivo es ayudarlas a escalar y alcanzar sus metas.”
Una vez inscritos, los propietarios de negocios colaboran estrechamente con los consultores en un análisis profundo de la gestión operativa, optimización de la tecnología, aumento de la eficiencia y administración de recursos.
La gestión del flujo de efectivo es otro de los aspectos centrales del programa. “El flujo de efectivo debe gestionarse y pronosticarse correctamente”, explica Franco, quien ayuda a las empresas a entender los términos de pago, optimizar reservas y prepararse para los gastos de crecimiento. Los consultores luego guían a los emprendedores a través de diversas opciones de acceso a capital, desde préstamos tradicionales hasta fuentes de financiamiento alternativas, como Instituciones Financieras de Desarrollo Comunitario y subvenciones que podrían no conocer.
El enfoque del programa luego se orienta al desarrollo empresarial. En esta etapa, los consultores crean estrategias de crecimiento personalizadas y brindan apoyo en tareas clave, desde la obtención de certificaciones hasta el desarrollo de planes de marketing.
Finalmente, según Franco, lo que distingue a este programa es la creación de una red confiable de asesores. Franco y su equipo de consultores aprovechan la red profesional de Chase para conectar a los propietarios de negocios con otros expertos calificados que pueden apoyar su crecimiento a largo plazo, como contadores y asesores financieros.
Durante el compromiso de cuatro meses, los propietarios reciben hasta 10 sesiones de consultoría personalizadas, junto con cuadernos de trabajo y ejercicios prácticos diseñados para desarrollar estrategias de crecimiento que sean accionables.
La integración del programa con la suite completa de soluciones financieras de Chase garantiza que las empresas tengan acceso a las herramientas y recursos necesarios. Además, los Consultores Senior de Negocios organizan eventos de networking, donde los participantes del programa Coaching for Impact de Chase for Business pueden conocerse, compartir estrategias exitosas y, en muchos casos, encontrar maneras de colaborar.
Coaching for Impact ayudó a Cueto a implementar dos cambios clave en su negocio. En primer lugar, estableció procesos que optimizaron las operaciones diarias. “Desarrollamos procesos claros, como la creación de un sistema de revisión semanal para tareas y comunicaciones con los clientes”, explicó. “Esto me permitió operar de manera más eficiente y centrarme en tareas de mayor valor, como la estrategia y el compromiso con los clientes, en lugar de quedarme atrapada en el trabajo administrativo.”
En segundo lugar, Franco la guió en el uso de herramientas específicas de la industria y ayudó a establecer objetivos SMART (específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con límite de tiempo) para el crecimiento, como implementar herramientas de marketing digital que optimizaron su sitio web e incrementaron el tráfico en línea. Como resultado, Cueto pudo dar un paso atrás y analizar el panorama general de hacia dónde se dirigía su negocio.
Este cambio de mentalidad fue crucial al prepararse para sus exámenes de certificación como Agente Inscrito, lo cual le permitiría manejar impuestos tanto para individuos como para empresas. Debido a que había establecido un equipo sólido y procesos eficientes, pudo alejarse de las operaciones diarias para enfocarse en esta prioridad estratégica.
Aunque Cueto se siente orgullosa de que la oficina de ATAX en Woodside cuente con tres empleados a tiempo completo y duplique su personal durante la temporada de impuestos, su mayor logro trasciende estos números. Su programa de escuela de impuestos, que capacita a preparadores de impuestos en inglés y español, ha transformado su negocio más allá de ser un empleador local, convirtiéndolo en un catalizador de cambio comunitario. Estudiantes de Connecticut y Pensilvania viajan para asistir a las clases, y cientos de graduados han lanzado sus carreras gracias a este programa.
En otras palabras, bajo el liderazgo de Cueto, ATAX Woodside no solo prepara declaraciones de impuestos, sino que también está preparando a sus vecinos para carreras que sostienen a las familias, especialmente dentro de la comunidad latina. “Eso se ha convertido en mi mayor pasión”, afirmó.
De cara al futuro, Cueto planea expandir su negocio a varias oficinas y explorar otros emprendimientos. Las herramientas y la confianza que adquirió a través de Coaching for Impact le han demostrado que estas metas están al alcance y que el éxito no solo se trata de gestionar las operaciones diarias, sino de construir sistemas que le permitan dar un paso atrás y planificar el crecimiento, sin perder de vista la calidad del servicio. Esta es la clave de lo que todos los propietarios de negocios buscan: escalar.
“A veces nos obsesionamos tanto con trabajar en nuestro negocio que olvidamos trabajar en él”, comentó Cueto. La transformación no ha sido fácil, pero ha valido la pena. Ahora, está dirigiendo un negocio que no solo atiende a clientes, sino que también eleva a la comunidad. Como dice su coach, Franco, el verdadero éxito no se mide solo en los logros empresariales, sino en el impacto que uno tiene en la comunidad donde opera. Esa es la verdadera medida del éxito.
Para Franco, el impacto del programa va más allá de los números y las estrategias. “No tengo más que respeto por la mente creativa de un propietario de negocio”, expresó. “Cualquiera que tenga el valor de idear una idea, un concepto, un servicio, y diga: ‘Lo voy a hacer realidad’, merece respeto. Es un placer ver a estos negocios tener éxito y ser parte de esa historia.”
Para más información, visita chase.com/coachingforimpact.
La información proporcionada es solo para fines de discusión. La participación en el Programa Coaching for Impact está sujeta a disponibilidad. Debe considerar cuidadosamente sus necesidades y objetivos antes de tomar cualquier decisión y consultar con el profesional adecuado.
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