En un esfuerzo por cambiar la cara de Brentwood, luego de los asesinatos de los últimos meses y la presencia de pandillas como la MS-13, Margarita Espada, directora del teatro Yerbabruja, el centro de artes comunitarias más importantes de esta zona de Long Island, viene trabajando con la comunidad en un proyecto de renovación de las paredes que han sido vandalizadas con graffitis por parte de grupos violentos.
La legisladora Mónica Martínez se unió a este proyecto, al igual que la policía del condado de Suffolk, y decenas de voluntarios más.