El fiscal de distrito del condado de Suffolk (SCDA), Raymond A. Tierney, anunció que Gustavo Hernández, de 38 años, Walter Ramírez Jerónimo, de 19 años, y Wilson Ramírez Jerónimo, de 18 años, todos residentes de Farmingdale, fueron acusados por su presunta participación en el secuestro y asesinato de Juan Carlos Díaz Jerónimo, de 48 años, quien vivía en Amityville.
«Las acusaciones son profundamente inquietantes. La naturaleza descarada de este delito, que ocurrió en un lugar público durante el día, conmociona la conciencia y socava nuestro sentido de comunidad», dijo el fiscal Tierney. «Esta acusación es nuestro primer paso en la búsqueda de justicia para Juan Carlos Díaz Jerónimo y su familia».
Según la investigación, la noche del 21 de junio de 2024, la víctima caminaba por Broadhollow Road, en Farmingdale cuando supuestamente fue visto por los acusados, que estaban en un auto Isuzu Rodeo azul.
Un video de vigilancia mostró a los acusados saliendo del vehículo, atacando a la víctima e intentando arrastrarlo hacia el Isuzu. Sus esfuerzos fueron frustrados por un automovilista que pasaba, lo que permitió a la víctima escapar a una gasolinera al otro lado de la calle.
Los acusados supuestamente siguieron a la víctima hasta la gasolinera. Las imágenes de vigilancia por video muestran a los hermanos Jerónimo cubriéndose el rostro y luego, junto con su tío, presuntamente golpeando a la víctima, tirándolo al suelo, estrangulándolo y obligándolo violentamente a subirse al maletero del Isuzu. El supuesto secuestro fue captado por el video y ocurrió en una gasolinera a plena luz del día.
Después de haber obligado a Díaz Jerónimo a subir al maletero de la camioneta, los acusados se dirigieron al parque estatal Belmont Lake y luego regresaron a Farmingdale, donde otro video de vigilancia los capturó supuestamente arrojando el cuerpo de la víctima en una calle residencial.
La oficina del médico forense del condado de Suffolk señaló que Díaz Jerónimo sufrió numerosas lesiones, entre ellas, asfixia debido a la compresión del cuello, un traumatismo grave por objeto contundente en el abdomen y lo que parecía ser una puñalada en la parte superior del pecho.
Los tres acusados fueron imputados por los siguientes cargos:
– Dos cargos de asesinato en 2do. grado, delitos graves de clase A a I;
– Un cargo de secuestro en 1er. grado, un delito grave de clase A a I; y
– Un cargo de intento de secuestro en 2do. grado, un delito violento de clase C.
Los cargos de asesinato en 2do. grado y secuestro en 1er. grado tienen cada uno una pena máxima de 25 años a cadena perpetua. El intento de secuestro en 2do. grado conlleva una pena máxima de 15 años de prisión.
Cabe informar que el 1 de agosto de 2024, los acusados fueron procesados formalmente ante la jueza interina de la Corte Suprema, Karen M. Wilutis quien ordenó que los tres implicados fueran puestos en prisión preventiva sin derecho a fianza mientras el caso estuviera pendiente. Los tres acusados hispanos deben volver a comparecer ante el tribunal el próximo 10 de septiembre.
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