A principios de este año, Jumaane Williams tuvo que luchar contra 16 candidatos para convertirse en el nuevo Defensor Público de la ciudad. El martes, superó fácilmente a solo dos candidatos para ganarse el derecho a permanecer en el cargo hasta 2021.
Williams superó al concejal republicano Joe Borelli de Staten Island y al libertario Devin Balkind con relativa facilidad, tanto en las urnas como en la votación final con 77.84% a favor del titular.
En Bar Chord en Flatbush, Williams y sus seguidores celebraron su victoria.
«Quiero asegurarme de que cuando termine mi mandato, nadie vuelva a cuestionar qué es el Defensor Público y si necesitamos ese cargo», dijo Williams. “Cuando estuve aquí hace solo ocho meses, dije que si hubiera comenzado a tratar mi propia salud mental hace años, ya estaría casado. Pero desde ese momento me comprometí… Aún estoy trabajando, ya que queda claro en la ciudad que necesitamos reevaluar nuestra propia salud mental».
La plataforma de Williams se basó en solicitar el control universal de la renta además de pedir reformas a la justicia penal.
Debido a que algunos en el gobierno han llamado a la oficina del Defensor Público un «lugar promocional» para los políticos que buscan otros puestos de gobierno, Williams hizo campaña para obtener más autoridad detrás del título. El poder de citación, derechos de voto en el Ayuntamiento y la capacidad de introducir legislación, son algunas de las formas en que prometió transformar la oficina.
La carrera de Defensor Público fue la oportunidad de aumentar la participación de los electores con la votación anticipada. No obstante, con el lanzamiento del programa durante una temporada electoral baja, poco más de 60,110 llegó a las urnas.
